Cuando hablamos de una “memoria corporativa” debemos pensar que se trata exactamente de eso; una memoria. Se trata de la preservación de un patrimonio, la historia, filosofía y conocimientos de una empresa o marca.
Es importante lograr “poner en la mesa” todos los conocimientos que se disponen en la empresa, esta transparencia y claridad de los activos intelectuales permite que no se den por perdidos u olvidados en la memoria.
Pablo L. Belly
¿Qué debe incluir una memoria corporativa?
Además de una reseña histórica que incluya la visión de la empresa para mantener a todos en la misma línea, una memoria corporativa debe ser actualizada año a año con los logros alcanzados en el último año. Éstos pueden ser el resultado de ciertas investigaciones, nueva maquinaria, premios o participación en eventos, el cumplimiento de metas en sustentabilidad o utilidades. Básicamente todo aquello que haga que los inversionistas, clientes y proveedores se sientan contentos de ser parte de la empresa.
Además de los logros es necesario documentar ciertos índices financieros. Datos duros acerca del rendimiento de la empresa en la bolsa o simplemente en términos de ingresos durante el año.
Por último, pero no menos importante, está la promoción misma de la empresa. Finalmente la memoria corporativa se hace no sólo con el fin de documentar y preservar el conocimiento sino que es un documento estratégico importante que puede ayudar a atraer nuevos inversionistas o generar nuevas alianzas.
En este sentido, el trabajo de los diseñadores se vuelve clave ya que con un buen diseño hay una mejor lectura y retención de la información; dos aspectos claves para la empresa en cuestión.
Si tu empresa esta planeando su próxima memoria corporativa, preocúpate de recolectar toda la información necesaria y deja el diseño en manos de Hey Diseño.